Hace unos días, al analizar Beyond Eyes, hablé de lo que pueden ofrecer los juegos indies. Hoy voy a hacerlo de otro título que forma parte de esta clase de producciones y que se vale de una curiosa historia para vestir su propuesta de acción y plataformas. Su nombre es Toren y, nuestro cometido, crecer y llegar a lo más alto… literalmente.
El misterio de la torre Toren
Toren es el nombre de una misteriosa torre, erigida en un pasado ya olvidado con un misterioso propósito. Moonchild, una niña pequeña, ha nacido para llegar a la cima con el fin de derrotar a un poderoso dragón negro que la aguarda. La joven crecerá al tiempo que se abre camino por el interior de la torre guiada por su mentor, un mago que poco a poco le irá revelando aspectos concretos de su verdadera identidad. También, en ocasiones, visitaremos otros entornos a través de los sueños de Moonchild.
Toren es, como dije al inicio, una mezcla de acción y plataformas con algún momento para los puzzles que jugaremos en tercera persona. El control es sencillo y responde bien a las órdenes del mando salvo cuando la cámara cambia de lado al cruzar una puerta y donde, si no tenemos cuidado, su posición nos hará volver sobre nuestros pasos. Algo que puede resultar ciertamente incómodo.
Con estilo propio
Toren no hace gala de unos gráficos que debamos definir como malos pero tampoco destaca especialmente. Lo que importa, no obstante, es que el conjunto se muestra sin ningún problema visible y consigue crear una atmósfera que invita a centrarse en la historia.
La música y los efectos de sonido siguen esta estela. Toren no cuenta con diálogos hablados pero está traducido y si por alguna razón nos perdemos algo o no lo recordamos, siempre podremos volver a leer todo lo previamente descubierto.
VALORACIÓN OBJETIVA
Toren no es una producción que vaya a pasar a la historia pero cumple con creces su cometido. Su historia es interesante y su apartado técnico suficiente para aquellos que no sean demasiado exigentes a este respecto.
VALORACIÓN PERSONAL
Toren ha sido una experiencia agradable. Su duración, más bien corta, hace de este juego un perfecto eslabón entre propuestas de mayor calibre que tengan capacidad para emocionar con más fuerza, pero la historia que cuenta no se queda atrás de la de cualquier gran producción aunque su parte técnica, por razones evidentes, sí lo haga. En cualquier caso, si se busca algo que disfrutar sin pretensiones, esta es al menos para mí una buena opción.