Este dicho hace referencia a todo aquello que nunca termina de llegar, de suceder. En el caso de los videojuegos se puede aplicar a esos títulos que, anunciados o no, o incluso con su desarrollo iniciado, siguen sin aparecer en el mercado. En consecuencia, y pese a tener toda una legión de fans que sí, contradicen lo que he comentado pues mantienen viva la esperanza, el grueso de los usuarios hace tiempo que se olvidó de ellos. En este post haré un breve repaso a los tal vez más famosos y que, dicho sea de paso, son los únicos que recuerdo…
La eterna espera. De este modo se puede describir lo que sucede con un juego cuyas entregas anteriores, en especial la primera, marcaron un antes y un después en su género y en el mundo del videojuego en general, de ahí su impacto. Ahora es cuando me tengo que poner el traje protector y aguantar la avalancha de palos al admitir que nunca he jugado a Half Life pese a la gran fama que atesora. ¿Por qué? No lo sé, imagino que estaba con otras cosas y ahora, pasado el tiempo, ya no me llama la atención, por lo que no puedo hablar mucho de él.
Como tampoco, como es obvio, de su secuela y de las expansiones que recibió, dos en concreto aunque se esperaba una tercera que tampoco llegó nunca a ver la luz. Y si esta no lo hizo, nada hace pensar que lo haga una nueva entrega pese a la inesperada aparición de Half Life Alyx, juego diseñado para realidad virtual que, no obstante, recibiría posteriormente una modificación para poder ser jugado de manera tradicional.
Sea como sea, los años pasan y Half Life 3 sigue sin dar visos de hacerse realidad. Y la verdad, tal y cómo están las cosas, lo cierto es que en Valve tampoco lo necesitan así que me da que quienes deseen verlo y jugarlo algún día se van a quedar como están.
El caso de Shenmue es ciertamente triste puesto que se trata de una historia inconclusa, y todo parece indicar que así continuará. El anuncio de la tercera parte fue, aun tratándose de un juego financiado vía Kickstarter en su mayor parte, una agradable sorpresa pero el resultado final no gustó demasiado ni a los puristas, que esperaban algo más impactante, a la altura de las entregas de Dreamcast, ni a los nuevos jugadores que apenas conocían nada de la saga y su propuesta jugable.
Ys Net, el estudio de Yu Suzuki, es un grupo demasiado pequeño para acometer semejante proyecto en la escala que muchos demandan y para muestra un botón: contando el personal externo, en Shenmue III trabajaron unas 75 personas. En los juegos previos llevados a cabo por Sega, el grueso del equipo llegó a las 300. Es por tanto imposible que, a día de hoy, llegue una cuarta entrega que sí cumpla las expectativas a no ser que aparezca un fuerte inversor. Y si tenemos en cuenta, además de la actual crisis del sector, la tibia recepción de la tercera, dudo mucho que alguien se anime a dar ese paso.
Como alguno seguro diría, el caso de Beyond Good & Evil 2 es para mear y no echar gota. Su desarrollo comenzó como una secuela directa del original que, por cierto, parece que en breve recibirá una revisión actualizada por su vigésimo aniversario. De hecho, existe un breve teaser del mismo que data de 2009 pero, por alguna razón, se abandonó ese proyecto en pos de una propuesta de mundo abierto con otros protagonistas y una historia anterior en el tiempo sin conexión aparente con la primera en un principio aunque parece que eso cambió poco después, posiblemente por presión de los fans.
El caso es que tras las primeras noticias y los materiales mostrados del nuevo enfoque del juego hace ya varios años, nada se ha vuelto a saber del mismo. Parece claro que Beyond Good & Evil 2 se encuentra en un limbo del que no va a salir a corto plazo, si es que lo hace alguna vez. Y sinceramente, y digo esto a título personal, viendo lo que se estaba gestando casi es mejor que no lo haga nunca.
A veces los astros se alinean y juegos que parecen tener un desarrollo interminable acaban llegando al mercado, eso sí, con diversa fortuna. A la mente me vienen en concreto dos: Duke Nukem Forever y Dead Island 2.
El primero es famoso precisamente por su larga gestación (más de 15 años) durante los cuales se cambiaron cosas como el motor gráfico y otros aspectos técnicos y jugables. Incluso 3D Realms, la compañía que lo inició, acabaría abandonando el proyecto para dejarlo en manos de Gearbox, que lo finalizó y lanzó al mercado con nefasto resultado. Dead Island 2 también pasó por muchas manos antes de ver la luz, si bien en este caso el juego final fue mejor recibido merced a su calidad general.
¿Llegarán a materializarse algún día los juegos mencionados? Cosas más raras se han visto pero personalmente yo no lo creo aunque la posibilidad, por muy pequeña que sea, esté ahí…